sábado, 26 de septiembre de 2015

Fragmentos: Con la vista hacia el cielo (XXIII)

Voy a ser breve porque llevo todo el día estudiando y noto que se me va a fundir el cerebro.

(Capítulo 12)
Kioni se sentía agotada. El viaje no había sido solo duro, sino también decepcionante y doloroso. Había ido a comprar. Apenas había conseguido nada, salvo algunas cosas que consiguió intercambiar o robar. No era muy buena con los negocios.
Pero lo peor, sin duda alguna, era que se había enterado de lo sucedido. Ya se temió que algo malo había pasado cuando no contestaron a su contraseña. Comenzó a llamar a Bicho. No obtuvo respuesta. Ni de Zorro. Después volvió al campamento y... vio que estaba desmantelado. Había débiles signos de lucha o de huida - apenas notables, lo suficiente para su mirada aguda -. Hierba aplastada, la hoguera artificial volcada, algún que otro vaso rodando por el suelo en la caravana.
Con perspicacia y constancia, comenzó a investigar y... tal como temió, la verdad se presentó ante ella con una sonrisa cruel. Ni siquiera había podido ir a visitarlos, habría sido demasiado arriesgado y no habría ayudado a nadie. Ya había preocupado demasiado al clan llegando un día tarde.
Buscaba a David. Quería hablar con él y preguntarle cómo estaba. Había visto su expresión... Y, bueno, la del otro joven también prometía bastante. Tenía la impresión de que ambos estaban destrozando algo o, en el caso de Ángel, haciendo algo para evitar precisamente que eso ocurriera. Probablemente, correr.
Caminó hasta el salón con confianza y se detuvo de golpe cuando se encontró a Marco y a Annie, sus rostros a escasos centímetros el uno del otro. La joven, atónita, solo fue capaz de alzar las cejas y soltar un leve:
-Oh.
Los otros dos dieron un respingo y se apartaron rápidamente el uno del otro, con las mejillas de un rosa casi brillante - sobre todo las de la mujer -. A medida que fue asimilando lo ocurrido y Annie se preocupaba por mirar a todos lados siempre y cuando no fuera una persona, su sorpresa fue sustituida por una sensación punzante en el pecho. Dolor, mezclado con ira. ¿Qué tenía la otra que ella no poseía? Aparte de una cara bonita, una piel blanca preciosa, una buena figura, una edad razonable, madurez, su persistente amabilidad, preocupación por los demás, alas...
Se dio cuenta de que era absurdo enfadarse, pero por algún motivo eso tan solo lo empeoró todo. Se sentía miserable; el único motivo por el que la querían en aquel sitio era porque podía ayudarlos. Porque podía conseguir lo que necesitaban para vivir. Pero no estaba en su club VIP para personas especiales con alas. Allí, ella era la rara, la que estaba fuera de lugar.
Por eso nunca la querrían por sí misma. Ella no podía unirse a sus largas horas en el aire. Si quería moverse como ellos, tenían que cogerla. No compartía la experiencia.
-¿Sabéis dónde está David?- preguntó con brusquedad.
-Estaba en su cuarto...- repuso Annie, confusa.
-Ya he mirado ahí, y no está.
-Perdona- contestó ella, sin saber muy bien por qué, ante el tono frío de la chica. Entonces Marco intervino, con una voz no tan fría pero sí bastante severa, casi de advertencia:
-Mira en el estudio. Suele esconderse por ahí cuando está molesto...
Frunció el ceño. No era el mejor lugar al que podía ir. Estaba lleno de libros que había comprado en el mercado negro, y dudaba que le ayudara a aliviar su dolor. Aunque, claro, si era un masoquista no era asunto suyo.
Se dio la vuelta para ir a buscarlo, planteándoselo todo de nuevo - volvía a estar de mal humor y posiblemente eso no ayudara al muchacho -. Sin embargo, antes de que pudiera salir de la sala, Annie dijo:
-Ángel sí que debe estar en su cuarto.
-No recuerdo haberte preguntado- espetó Kioni entonces, mirando ligeramente por encima de su hombro.
La mujer retrocedió un paso con el ceño fruncido, dolida. Se marchó de allí antes de que Marco pudiera hacer nada como regañarla en defensa del honor de la dulce y elegante dama. Estaba cansada de tanta mierda.

2 comentarios:

  1. Vaya. Menuda depresión. Pobre Kioni. Menos mal que salí en defensa suya ante tu gran idea...
    Un beso ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja la maltrato xP Pero no pasa nada, después será to happy xD
      Después de mucho sufrimiento...
      ¡¡¡Un beso!!!

      Eliminar

¿Comentas? *oo* I shall be forever grateful

Pokemon - Vulpix